Hoy te escribo para contarte que se quien eres. Hoy quiero decirte que te conozco; he visto en ti miedo, confusión y dolor. Ve y afronta lo que te ha pasado, se libre y olvida.
Eres una gran mujer; lo que has hecho no lo hace cualquiera y deberías centrarte en lo bueno y agradecer por ser cada día un poco mejor.
Gracias a ti me llegue a dar cuenta de que lo que buscaba lo tenía delante, que no debería seguir por ciertos caminos, fue increíble, pero me hiciste caer en cuenta de muchas cosas que daba por supuestas o sabidas, ¡oh gran lección!.
Gracias a ti te conozco más, ahora se que sólo quieres cariño, que detrás de esa carita de refunfuñona hay una gran persona, que sólo quiere amor;también se que estás sola; ¡yo también!, veo tristeza en tu rostro y me acongojo, has tocado un punto de mi corazón que yo no conocía, no sé lo que pasó, pero gracias a ello te veo con otros ojos, gracias a ello te veo con el corazón.
Siento pena porque nuestros caminos sólo se cruzan pero no se juntan, ni siquiera vamos en paralelo; y aunque nos parecemos un poquito y creo que eso es una buena chispa, si no superamos nuestros handicaps, nunca llegaremos a ser felices, ni tú por tu lado, ni yo por el mío.
Siento pena por no poder estrecharte entre mis brazos y decir te quiero como un loco enamorado, siento pena por todos esos lindos momentos que pudiésemos haber vivido juntos; siento pena por no poder estar a tu lado y apoyarte, por no ver tu sonrisa y sentir tus labios suaves cual espuma; y siento pena por no poder pasar de este punto y final.
